WILLIAM WHEELWRIGHT Y LA APERTURA EN VALPARAISO

Lagos acaba de inaugurar el Paseo Wheelwright en Valparaíso que recorre la costa a lo largo de la ciudad. Guastavino dijo que el Presidente cumplió su promesa y le devolvió el mar al Puerto. Me acuerdo de lo que decían Saldivar y Rodríguez, -le falta mar- en su mítico recorrido, buscando los lugares fotografiados el siglo XIX, ahora en el XXI. Y se eligió el nombre de un gringo del 19, oriundo de la costa este de EEUU, que trajo capitales de Londres para establecer la navegación a vapor estable entre Valparaíso y Cobija. Pero, ¿quién es Wheelwright?

Hay que buscarlo en wikipedia, pero no hay resultado alguno. Ni siquiera en inglés. Entonces a Google, y ahí está. En la enciclopedia escolar Icarito. William Wheelwright, un norteamericano hijo de ingleses, nacido en Massachussets, que llega por Cabo de Hornos e instala la Pacific Steam Navigation Company en 1840, primera línea de vapor entre la Perla del Pacífico y Cobija. Todo gracias a una concesión que le otorga el gobierno de José Joaquín Prieto, anticipándose hasta estos tiempos para la generación de infraestructura pública.

Promovió la extracción de carbón para sus vapores y llegó a 4 mil toneladas. ¿Lo habrían querido los mineros de Lota? Un encadenador de oportunidades, diría la otra. Después amplió su navegación hasta Europa y ofreció el servicio completo: pasajeros, carga y correspondencia. ¿Cómo habrá tratado a sus trabajadores? ¿Tendría subcontratados? Dicen que era un conservador, y que la estabilidad de Chile le gustó para sus negocios. Otro más. Seguro que también era un explotador. Me acuerdo del imperialismo yanqui y Henry me dice que debe haber sido uno de los que nos llevó a la Guerra del Pacífico. Un impulsor del conflicto, por su herencia.

En todo caso, me recuerda al “Ministro Lagos”, porque además, este gringo creó el primer ferrocarril, ese que iba de Copiapó a Caldera –donde los opositores al proyecto en el Congreso eran los dueños de la tracción animal. Su última propuesta (inconclusa) fue la de establecer ferrocarriles bio - oceánicos, tema aún pendiente con nuestros vecinos de Sudamérica.

Apuesto a que a Lagos le encantó ese nombre para cumplir sus promesas, pueden ser las reminiscencias de Duke, del Estado de Carolina del Norte donde realizó su postgrado. Seguramente contemplando un amanecer Atlántico, apareció por primera vez Wheelwright como su mentor secular, una inspiración del pasado nacional, para lo que sería mas tarde como Ministro de Obras Públicas.

Lagos debe tener un alterego en Wheelwright, y llamó a este gringo emprendedor a reconvertirse en un icono porteño, pregonado por un Intendente ex –comunista. Se supone que el mensaje es una apertura total, mientras tanto los porteños fascinados con esto de reabrir la historia y lanzar su esperanza al Pacífico Sur.
Berni Cancino